El lunes 20 de junio dejó de existir físicamente, a los 83 años, el señor Néstor Sarria, quien fuera desde la década de los 80 hasta nuestros días, un dirigente de activa participación y compromiso con el mutualismo nacional e internacional. Asumió la presidencia del INAM (Instituto Nacional de Acción Mutual), actual INAES (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social), durante la primer presidencia del doctor Raúl Alfonsin. Se desempeñó como Gerente en la Asociación de Médicos Municipales de la Ciudad de Buenos Aires y fue fundador y referente de importancia de la Federación de Entidades Mutuales de Buenos Aires (FEDEMBA), como así también, participó en la constitución de la Confederación Nacional de Mutualidades de la República Argentina (CONAM). Fue uno de los fundadores de AMA (Alianza del Mutualismo de América), y se desempeñó como Gerente de la Sociedad Argentina de Cardiología,  durante más de cuarenta años.

Al frente del INAM posibilitó una amplia participación del mutualismo organizado e integrado a través de la  Confederación Argentina de Mutualidades (CAM), para que pudieran estar presentes en las reuniones de los Consejos Federales con voz y voto en las discusiones de cada Resolución considerada y quienes fuimos sus amigos valoramos su amplia y dilatada actividad mutual.  Fue además un activo participante de la vida política desde la Unión Cívica Radical, fundamentalmente en el periodo democrático que se abre a partir de 1983, con la vuelta a la democracia. Estaba comprometido con la educación mutual y también promovió la creación del ACEM y la reforma del artículo 9º de la ley 20.321, estableciendo un porcentaje destinado a capacitación mutual.

La Junta Ejecutiva y Junta Fiscalizadora de CAM hacen llegar el más sentido pésame a toda su familia.

Querido amigo Néstor, fuiste  un hombre comprometido con todo lo que hiciste,  seguramente puedes recibir opiniones y recuerdos elogiosos o negativos, pero nunca podrías pasar desapercibido, fuiste  un constructor de relaciones, un político visionario, un dirigente honesto, y fundamentalmente una persona que trascendió por su compromiso con la sociedad. 

Nunca podré olvidar tu fuerte apretón de manos, el que me diste hace poco más de un mes cuando ya estabas internado, tus ojitos celestes mostraban mucho brillo,  y todavía reflejaban las ganas por seguir luchando.  Seguramente, en algún momento,  cuando Dios así lo quiera, nos volveremos a encontrar.

Un fuerte abrazo, mi  respeto y cariño para Elsa, Andrea y Patricia.

Alejandro Russo

Presidente de CAM