Con una clase magistral de Arnaldo Bocco y una exitosa convocatoria inició la Diplomatura en Administración Financiera de Mutuales
Más de 100 estudiantes de diversas latitudes del país poblaron el aula virtual para asistir a la charla magistral del Dr. Arnaldo Bocco con la que inició, el viernes 24 de julio, la quinta edición de la Diplomatura en Administración Financiera de Mutuales, organizada por la Confederación Argentina de Mutualidades (CAM) y la Universidad Atlántida Argentina.
El acto de apertura fue guiado por el Coordinador General, Enrique Fernández Quintana y contó con la presencia de Alejandro Russo, Presidente de CAM, Amado Zogbi, Rector de la Universidad Atlántida y Arnaldo Bocco, Coordinador Académico y Director del Banco Central, quien ofreció un conferencia magistral sobre el contexto actual y los retos que deberán asumir las entidades en un mundo que se complejiza.
“Se vienen momentos muy difíciles. Obviamente que vamos a salir como hemos salido de otras crisis. Pero de esto se sale con dos elementos fundamentales: solidaridad y capacitación”, expresó Alejandro Russo, luego de agradecer a la Universidad y al cuerpo técnico y académico, por acompañar este proyecto formativo de CAM.
“No es un agradecimiento formal. Es una agradecimiento a la disposición de la estructura para que esto se lleve adelante con la flexibilidad y el entendimiento de la especificidad de este sector”, remarcó.
El Dirigente narró la manera en que cada uno de los presentes se involucró en el proceso de diseño del trayecto formativo, a partir de la observación de experiencias anteriores, la consideración de normativas que exige el contexto y todos los factores necesarios para lograr que llegue “con el mejor precio, la mejor calidad, en un momento oportuno y con la mayor transparencia”, destacó.
“Espero que disfruten tanto como las cuatro cohortes anteriores esta Diplomatura en Administración Financiera de Mutuales”, fue su deseo para los estudiantes.
“Bienvenida sea la CAM por no esquivar ningún desafío”, expresó Amado Zogbi, rector de la Unversidad Atlántida Argentina.
La máxima autoridad académica de esa Casa de Estudios recordó que en sus orígenes se encuentra el espíritu asociativo y anunció la creación de una mutual que ofrecerá servicios a docentes y estudiantes.
“Para nosotros es un orgullo seguir trabajando con CAM. Nos planteábamos el desafío de la federalización y hoy, pandemia mediante, está Superado”, expresó y felicitó a quienes optaron por entregarse a este proceso formativo.
“Me parece que lo más importante es que sean fuertes y capaces de sostener sus instituciones. No hay mejor forma de fortalecerse que generando capacitación”, aconsejó.
“Esta Diplomatura es de excelencia por dos razones: primero por la calidad de los docentes y segundo porque apuntamos a la especialización, porque las materias que elegimos hace que mejoren ustedes la calidad de las instituciones”, destacó Enrique Fernández Quintana, quien no perdió oportunidad para agradecer al cuerpo docente, a la dirigencia y a las estructuras institucionales de CAM y la Universidad Atlántida por la visión y por garantizar las condiciones para el dictado.
Asistieron al inicio de este ciclo estudiantes de Chaco, Neuquén, Tucumán, Ciudad y Provincia de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fé, Mar del Plata, Entre Ríos y Formosa, que cada quince días participarán de esta propuesta, que ya cuenta con más de 200 personas formadas en cuatro cohortes anteriores.
Modernizar las instituciones hacia un mudo cada vez más exigente
“Sean eficientes y transparentes. Mientras más fuertes, más solidarias y más integradas estén las entidades con la comunidad, más difícil le va ser a la competencia (lucrativa) quedarse con los asociados. Lo bueno de todo esto es que las relaciones humanas van a volver a primer plano, luego de haber estado mercantilizadas y diluidas”, reflexionó Arnaldo Bocco, director del Banco Central y coordinador académico de la Diplomatura, hacia el final de una clase magistral que brindó en el acto de apertura del ciclo.
A continuación algunas de sus reflexiones:
“Estamos transitando probablemente uno de los momentos más difíciles que el mundo ha encarado durante muchos años, donde una crisis sanitaria puso en vilo a la humanidad y la confrontó con la capacidad para resolver algo inimaginado”.
“Llegamos a una situación que no se había registrado antes en la forma de conducir las instituciones, el comercio, el mundo, la política estatal, la diplomacia”.
“La salud pasó a ser un componente fundamental, que obliga a los ámbitos locales de desarrollo ( llámese Municipio, Provincia, Estado Nacional) ponerse al frente de una constelación de instituciones que tengan en el centro la salud, que a partir de ahora, probablemente, no será un negocio sino un compromiso”.
“La Sociedad que viene va a ser diferente. La salud va a ser parte de nuestras vidas pero por otro lado situaciones que se pensaba que iban a tomar cuatro o cinco años en resolverse, se resolvieron en cuatro meses. Si uno pensaba que la digitalización del mundo de las finanzas en lugares atrasados iba a tener un desarrollo en cinco años, todo eso paso en cuatro o cinco meses”.
“Lejos de la amenaza del impuesto a las ganancias cuatro o cinco años atrás, hoy el desafío es otro: cómo se adaptan, en este contexto, las entidades a un mundo para el que no estábamos preparados”.
“La reacción del estado es anticiparse a los hechos y empezar a obligar a tomar decisiones en el plano de la salud, finanzas, relaciones internacionales para que quienes vivimos en sociedad no nos veamos sobrellevados por esa lucha que también van a tener entre sí los países”.
“Entre los países van a haber ganadores y perdedores, porque la crisis puso de manifiesto quiénes tenían fortalezas en determinados campos y quiénes solo marketing”.
“Generalmente la reacción del ser humano es cuidarse entre unos y otros. Eso se llama solidaridad. Hay países que reaccionaron así. Otros quisieron hacerlo, como en Estados Unidos, pero no tuvieron cómo. En Estados Unidos, alguien se enfermó, entró a un hospital y se fue a su casa con una deuda millonaria, porque el sistema es privado”.
“El mundo dejó la multilateralidad. A los estados ya no les alcanza porque son lentas burocracias. Comenzó a jugar la bilateralidad”.
“El mundo es hoy un mundo muy exigente. Este siglo va a ser de Asia. La habilidad será ver cómo nos integramos con Asia y qué le vendemos”.
“No se puede mirar cómo se mueve el mundo en función del espejo retrovisor”.
“El mundo asiático, primero, es el más solidario. Lo que gana el más rico es cuatro y cinco veces lo que gana el más pobre. La distribución del ingreso es 10 veces más equitativa.
“En el mundo que viene así como usás el cinturón de seguridad, el barbijo va a ser parte de tu vida. Asia tiene barbijo. Por eso a ellos (China) le tomó dos meses -en un país de 200 millones de habitantes- lo que a nosotros nos esta tomando cuatro o más. Hay una diferencia cultural importante. La familia asiática ahorra el 40 por ciento de su ingreso. Fue educada en un contexto de ahorro. Los países son muy prósperos, no sólo porque trabajan mucho, los chicos van al colegio de lunes a sábado para preparar su ingreso a la universidad”.
“Para bien o para mal las mutuales que supimos integrar van dejando lugar a instituciones nuevas. En ese mundo está todo por crear”.
“El INAES va a llegar junto con los hechos, para regular qué cosas son iniciales, pero vos sos la punta de lanza de la modernización”.
“Estos meses van a tener una gran formación técnica para lograr que su entidad tenga una formación especializada, que sepan en qué va a devenir el mundo y cómo va a ser la competencia. Van a recibir formación en materia de riesgo, auditoría legal, normas del INAES y del mundo financiero para lograr lo que nos ha pasado con otros integrantes de otras cohortes: salen fortalecidos, informados, capacitados, con instrumentos. Todo eso dependerá de la fortaleza y el liderazgo de cada uno, que puedan aplicarlo”.