Alejandro Russo: “Es posible conciliar eficiencia social, cívica, medioambiental y económica”
Así lo afirmó el presidente de CAM y miembro del directorio del INAES el jueves 10 de septiembre, al retratar el modelo de la Economía Social y Solidaria (ESS) en Argentina, durante su disertación sobre Financiación Pública y Privada en la segunda sesión de los Foros Internacionales de la Economía Social, que se realizan de manera periódica en Mont Blanc, Francia.
El dirigente compartió ante una audiencia de diversas latitudes del mundo las cifras de la Economía Social y Solidaria Argentina: 10 millones de mutualizados y 18 millones de cooperativizados, en una población de 45 millones de habitantes. Una de cada dos personas se encuentra adherida a una entidad. Mutuales y cooperativas aportan en conjunto 300 mil puestos de trabajo y 10 puntos porcentuales del Producto Bruto Interno.
Al abordar las cifras que indican el grado de bancarización de la sociedad argentina, Russo destacó que “aún existe más del 50% de la población adulta fuera del sistema financiero” para concluir que ese es el campo donde el universo de entidades solidarias que se dedican al ahorro y crédito brinda cobertura.
“Tenemos la gran responsabilidad de atender a los expulsados del sistema financiero y a los que consideran que nuestro modelo basado en la solidaridad, es una herramienta válida para satisfacer las necesidades, contribuyendo al respeto por el otro”, aseveró.
El presidente confederativo enumeró las virtudes de la actividad que realiza la ESS a la que definió como “un claro ejemplo de democratización del crédito”. “Dada su importancia” –recalcó- fue declarada por el gobierno actual como actividad esencial, mediante un decreto al inicio de la Pandemia.
“Nuestras organizaciones son entidades de cercanía y proximidad que conocen a sus asociados. Sus comportamientos cuentan con normas de crédito más flexible y ágiles que el sistema financiero. Crean un círculo de ahorro y financiamiento virtuoso. Captan el ahorro en la comunidad y en la misma comunidad se otorgan los préstamos, que financian industria, el comercio y estimulan el consumo. Utiliza la solidaridad como herramienta y pone al hombre en el centro de la escena”, caracterizó el presidente quien aclaró que es un sistema distinto, fuera de la competencia del Banco Central, pero con controles propios y del Estado Nacional.
Al graficar los vínculos entre el sector y el estado, Russo narró la manera en que se constituyó el INAES, con representatividad del sector el el directorio y elogió el rol que cumple como ente que rige, promueve y fiscaliza la actividad mutual y cooperativa, particularmente en lo que refiere al ahorro y crédito solidario.
De la misma manera valoró las acciones que desde el organismo se llevan adelante para vincular la multiplicidad actividades que realiza el sector con las dependencias del Estado, en un esfuerzo por construir espacios para el diseño de políticas públicas. En esa línea destacó la instalación de una mesa de enlace con el Banco Central de la República Argentina, que, aunque no rige la prestación de servicios económicos que brindan las entidades, emite normas que les competen.
En Argentina, según señaló el dirigente, “las políticas públicas, se desarrollan en una construcción diaria tanto por parte de los Estados, como también por parte de los distintos actores de las ESS”.
Destacó también la creación de un banco de proyectos y la promoción del vínculo entre el financiamiento mutual y la producción cooperativa bajo la modalidad de fondos productivos, en la que experiencias exitosas han permitido incluso la vinculación entre organizaciones de regiones distintas del país.
El modelo de la ESS en Argentina, que surgió hace 150 años para dar respuesta a las demandas de las comunidades, dió origen, según Russo, a “figuras extraordinarias: entidades que realizan aportes al trabajo, la producción, la salud, cuidado de personas, turismo, etc., con clara visión de protección del medio ambiente y compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la agenda 2030”.
En la segunda sesión de los Foros Internacionales de la Economía Social, participaron también Catherine Hock, presidenta de la Federación Internacional de Cooperativas y Mutuales de Seguros; Luc Lapointe, CEO y fundandor de BC.lab y Kerryn Krige, Asesora Técnica de la Organización Internacional del Trabajo. Las exposiciones giraron en torno a las posibilidades de financiamiento con las que cuentan las organizaciones de la Economía Solidaria del Mundo.
El diálogo fue moderado por Jerome Saddier, Presidente de la Cooperativa de Crédito y de ESS Francia y en la apertura del encuentro, Elisa Torrenegra, quien co preside el Consejo de Administración de la organización de los Foros, junto a el dirigente belga, Alain Coheur, dirigió unas palabras:
“Este panel esta dirigido a personas que todos los días hacen cosas por su comunidad, pero también compete a los gobiernos. ¿Será que podemos articularnos, sumar esfuerzos y ser parte importante de la solución de un mundo cada vez más consciente de la necesidad de la Economía Social?”, expresó Torrenegra, también dirigente AMA y AIM Latinoamérica.
La Asociación de los Encuentros del Mont-Blanc fue fundada en 2004 por el Grupo Chèque Déjeuner, la Maif, la Macif, el grupo Crédit Coopératif, la Caisse d’économie solidaire Desjardins, el Groupe Esfin-Ides y Fondaction, la Asociación de Encuentros del Mont-Blanc reúne a los dirigentes de la Economía Social y Solidaria internacional de manera periódica eneste Foro, para favorecer la visibilidad y el reconocimiento internacional de esta actividad.
El video de esta jornada será publicado en los próximos días en el siguiente enlace https://www.youtube.com/channel/UC-UeW1C7lMtOdIc4NmmNltQ
Los encuentros continuarán realizándose cada jueves hasta el inicio de octubre.